La ventana que se abrió al cerrar la puerta
La ventana que se abrió al cerrar la puerta
Incluso en la pérdida hay un lugar para el amor y la esperanza.
¿Qué viene después de una tragedia? ¿Cómo vuelvo a conectar conmigo mismo después de una mala racha? ¿Por qué siento que no merezco las cosas buenas que me pasan?
Seguro que alguna vez te has planteado una de estas preguntas, y es que, a veces, nos olvidamos de que, vivamos lo que vivamos, debemos aprender a querernos, a aceptarnos y a ser amables con nosotros mismos si queremos compartir este sentimiento con los demás.
Partiendo de un proceso personal de duelo, la ilustradora Sofía Zaragoza, SoyCloto, comparte los aprendizajes que la ayudaron a dibujar un rostro más amable con el que enfrentarse a la tristeza y al miedo y a encontrar las herramientas necesarias para querernos como nos merecemos.
El cuidado individual también es colectivo, por eso este libro está escrito desde el deseo de acompañar.